12 NUEVAS PERSONAS SE SUMAN A LA LISTA DE PRESOS POLÍTICOS EN CUBA DURANTE EL MES DE AGOSTO
12 nuevas personas se suman a la lista de presos políticos en Cuba durante el mes de Agosto. Un total de 12 nuevas personas se sumaron a la lista de presos políticos en Cuba durante el pasado mes de agosto, lo que eleva el total de prisioneros políticos en la isla a 1,045, según un informe de la organización no gubernamental Prisoners Defenders (PD).
El informe de PD también destacó que entre los encarcelados hay 36 menores de edad, incluyendo cuatro niñas, además de 115 mujeres. Esta situación es preocupante y refleja la crueldad del régimen cubano al apuntar a familias y menores para desalentar a los opositores más valientes.
Durante los últimos seis meses, el número de presos políticos en Cuba ha aumentado en 91 nuevos casos, con un promedio de 15 personas arrestadas cada mes. Esta tendencia muestra un deterioro constante de los derechos humanos en el país.
Los presos políticos en Cuba enfrentan condenas judiciales y disposiciones de limitación de libertad emitidas por las fiscalías, sin supervisión judicial ni defensa jurídica adecuada, lo que constituye una violación flagrante de la ley internacional que garantiza el debido proceso y la defensa efectiva.
Uno de los casos destacados es el de Luis Robles Elizástegui, quien continúa en la cárcel de máxima seguridad Combinado del Este en La Habana, a pesar de que se aprobó su traslado a un régimen de mínima severidad hace más de tres semanas. Su madre, Yindra Elizástigui, informó que las autoridades alegan que la evaluación de su expediente aún está pendiente y que la decisión final recae en un órgano desconocido. Esta situación ha causado gran preocupación a Luis y su familia. Fue condenado a cinco años de prisión por cargos de “propaganda enemiga” y “desobediencia” por una manifestación pacífica en diciembre de 2020.
Otro caso emblemático es el de Juan Enrique Pérez Sánchez, un preso político del 11J que, después de manifestarse en la prisión de máxima seguridad de Quivicán el 1 de septiembre, sigue aislado y sin comunicación con su familia. Pérez Sánchez fue condenado a ocho años de prisión por su participación en la manifestación del 11 de julio de 2021 en Nueva Paz, donde llevaba un cartel que decía: “Era tanta el hambre que nos comimos el miedo”. Su protesta en la prisión resultó en amenazas de ser trasladado al hospital psiquiátrico de La Habana.
Estos casos y el aumento constante en el número de presos políticos subrayan la falta de respeto del régimen cubano por los derechos humanos y las libertades fundamentales. La comunidad internacional debe continuar presionando al gobierno cubano para que libere a los presos políticos y respete los derechos de sus ciudadanos.
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