EX PRISIONERO POLÍTICO DENUNCIA ULTRAJE SEXUAL EN LA PRISIÓN DE HOLGUÍN
El ex prisionero político Julio César Morales González ha denunciado públicamente haber sufrido ultraje sexual mientras estaba detenido en la prisión El Yayal, localizada en la oriental provincia de Holguín. Según sus declaraciones a la plataforma Cubanet, estas prácticas son comunes en las cárceles de Cuba, donde los guardias emplean golpizas y tratos crueles para someter a los reclusos. Morales González, quien pasó inicialmente seis años en prisión por el supuesto delito de sabotaje en 1993, enfrentó situaciones difíciles durante su encarcelamiento.
Su madre, Rosaida González Escalona, una Dama de Blanco, recordó que su hijo fue condenado inicialmente por romper un cristal en un cine y luego recibió más condenas por defender a otro prisionero de una golpiza y por escribir consignas antigubernamentales en las paredes. Morales González cumplió una pena total de 12 años en prisión.
Uno de los episodios más difíciles durante su encarcelamiento fue cuando escapó durante 72 horas y luego fue recluido en una prisión de régimen especial, conocida por ser un lugar donde se somete a los reclusos a torturas y tratos inhumanos. Morales González mencionó que los prisioneros son transferidos de manera constante entre diferentes compañías y que en estas transiciones a menudo se convierten en víctimas de abuso sexual.
Tanto Morales González como su madre han sido arrestados y reprimidos por la Seguridad del Estado mientras participaban en protestas pacíficas. Su madre recordó un incidente en el que su hijo fue brutalmente golpeado en la calle y sufrió múltiples fracturas en la mandíbula y heridas en las fosas nasales.
En relación con este tipo de abusos, Diasniurka Salcedo Verdecia, activista cubana, compartió que fue abusada sexualmente por dos agentes de la Policía política durante su detención, mientras que la también activista, Yeilis Torres Cruz, afirmó haber sido violada en un lugar conocido como: 100 y Aldabó, señaló que muchas otras jóvenes que participaron en protestas también fueron víctimas de abuso sexual en ese mismo lugar.
Un informe titulado Tortura en Cuba, elaborado por varias organizaciones de la sociedad civil, documenta numerosos casos de personas liberadas después de las protestas del 11 de julio que denunciaron torturas y malos tratos, incluyendo amenazas de abuso sexual.
Las denuncias de abuso sexual, tortura y tratos crueles en las cárceles cubanas y durante detenciones arbitrarias continúan siendo una preocupación grave, según los testimonios de ex prisioneros políticos y activistas de derechos humanos.
