TRIBUNAL ESTADOUNIDENSE SENTENCIA AL GOBIERNO CUBANO A PAGAR 2.595 MILLONES POR EL SUICIDIO DE GUSTAVO VILLOLDO ARGILAGOS Y TORTURAS A SU HIJO EN 1959

Según la reciente sentencia de la jueza Nina Y. Wang, del Tribunal de Distrito del estado de Colorado, el gobierno de Cuba deberá pagar 2.595 millones a Gustavo y Alfredo Villoldo, hijos del empresario cubanoamericano Gustavo Villoldo Argilagos, que en 1959 fue incitado al suicidio que finalizó con su vida el 16 de febrero, por el Comandante del Ejército Rebelde Ernesto Guevara de la Serna, más conocido como el Che Guevara. Además, el propio Gustavo fue también entonces apresado, torturado y privado de agua y alimentos.

Los demandantes pudieran cobrar el monto referido mediante la confiscación de presuntos activos que el gobierno cubano tiene en Colorado, para culminar un proceso iniciado contra el régimen cubano en 2011 en el Tribunal del Condado de Miami-Dade, en el estado de Florida, por los cargos de angustia emocional, pérdida económica y homicidio culposo.

Ya en ese entonces, ante la ausencia de algún representante del acusado, la jueza del tribunal de circuito, Beatrice Butchko, dictó sentencia a favor de los hermanos en 2021, otorgándoles el derecho a una indemnización de 2.790 millones, a pagar por el gobierno de la isla.

El caso se resolvió bajo el amparo de la Ley de Inmunidades Soberanas Extranjeras, que permite establecer demandas contra naciones identificadas como patrocinadoras del terrorismo, lo que otorgó plena jurisdicción al Tribunal presidido por Wang para dictar una sentencia que se erige como un cardinal precedente para que otros cubanos exiliados en los Estados Unidos, o sus descendientes, puedan establecer demandas similares por acciones represivas del gobierno cubano.

Villoldo Argilagos dirigía una concesionaria de la General Motors en Cuba, gozaba de la doble ciudadanía y de una fortuna apreciable, que a inicios de la revolución se convirtió en objetivo del régimen de Fidel Castro. Según los demandantes, Guevara terminó amenazando al hombre de negocios con asesinar a toda su familia si no entregaba su fortuna al nuevo gobierno, provocando que al día siguiente este se suicidara.

La jueza Wang calificó como “acto de Gobierno” el suicidio a consecuencia de las intimidaciones del “Che”. “Esta amenaza se produjo después de meses de hostigamiento contra la familia Villoldo y el encarcelamiento de Gustavo y Alfredo (incluida la tortura de Gustavo), y se hizo en un momento en que los agentes revolucionarios perseguían a personas con vínculos con los Estados Unidos y ejecutaban a ciudadanos cubanos y residentes”, afirmó.