ETECSA RESPONSABILIZA A LA EMPRESA ELÉCTRICA POR INTERRUPCIONES EN SUS SERVICIOS
Etecsa responsabiliza a la empresa eléctrica por interrupciones en sus servicios. El monopolio de las telecomunicaciones en Cuba, Etecsa, ha responsabilizado a la Empresa Eléctrica por las interrupciones frecuentes en los servicios de telefonía fija, datos móviles y conexión a Internet que han estado afectando a los cubanos.
Gustavo López Cruz, jefe del Departamento Comercial en la División Territorial de Etecsa en Sancti Spíritus, explicó que la crisis en el sistema electroenergético nacional ha tenido un impacto negativo en todos los servicios de telecomunicaciones.
La capacidad de generación eléctrica ha enfrentado un déficit significativo, lo que ha llevado a problemas en la telefonía básica, la cobertura celular, la velocidad de la conexión y el acceso a Internet.
El problema radica en que todo el equipamiento del sistema de telecomunicaciones depende de la energía eléctrica para funcionar. Cuando hay apagones prolongados, a pesar de contar con respaldos de batería en las centrales telefónicas y radiobases, estas baterías solo pueden mantener la operatividad durante un máximo de cuatro horas.
Además, muchas de las radiobases ubicadas en lugares con infraestructura limitada no cuentan con grupos electrógenos, lo que las hace especialmente vulnerables a las interrupciones cuando falla la energía.
El jefe del Departamento Comercial de Etecsa también señala que las baterías existentes se han deteriorado con el tiempo y no ha sido posible reemplazarlas. En casos de desastres naturales, como ciclones tropicales, algunas radiobases y centrales telefónicas cuentan con grupos electrógenos, pero la falta de combustible también afecta la capacidad de mantener los servicios en funcionamiento en tales situaciones.
La interrupción de la energía no solo afecta la cobertura en una zona específica, sino que tiene un impacto en áreas circundantes. Por ejemplo, en la ciudad de Sancti Spíritus, donde hay más de 20 radiobases, la caída de una de ellas aumenta la carga de tráfico en las radiobases cercanas, lo que deteriora la calidad del servicio.
En las zonas rurales, donde una radiobase puede ser la única fuente de cobertura, la situación es aún peor, ya que una interrupción puede llevar a la pérdida total del servicio de datos y voz.
El financiamiento para comprar nuevas baterías es un problema adicional. Según López Cruz, el país no dispone de los recursos necesarios para reemplazar las baterías afectadas en las radiobases y gabinetes.
Además, desde una perspectiva estratégica, comprar nuevas baterías mientras persisten los apagones sería poco efectivo, ya que estas se deteriorarían nuevamente debido a los ciclos repetidos de carga y descarga.
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