Seleccionar página

EXCLUSIVA: “EN TU PALABRA Y EN TU DISCURSO, EN TUS DECLARACIONES, ESTÁ EN JUEGO EL DESTINO DE ESTA REVOLUCIÓN”, LA GRAN MENTIRA QUE FIDEL CASTRO LE DIJO A ARNALDO OCHOA

EXCLUSIVA: “EN TU PALABRA Y EN TU DISCURSO, EN TUS DECLARACIONES, ESTÁ EN JUEGO EL DESTINO DE ESTA REVOLUCIÓN”, LA GRAN MENTIRA QUE FIDEL CASTRO LE DIJO A ARNALDO OCHOA
<span class="bsf-rt-reading-time"><span class="bsf-rt-display-label" prefix="Tiempo de lectura"></span> <span class="bsf-rt-display-time" reading_time="7"></span> <span class="bsf-rt-display-postfix" postfix="mins"></span></span><!-- .bsf-rt-reading-time -->

EXCLUSIVA: “En tu palabra y en tu discurso, en tus declaraciones, está en juego el destino de esta Revolución”, la gran mentira que Fidel Castro le dijo a Arnaldo Ochoa. “En tu palabra y en tu discurso, en tus declaraciones, está en juego el destino de esta Revolución”, fue la gran mentira que el dictador Fidel Castro Ruz le dijo a su muy fiel general Arnaldo Ochoa, poco antes de que fuera sometido a juicio público, en el que se le endilgaron todas las culpas del tráfico de drogas, diamantes, marfiles y armas que operaba por orden directa del tirano y su medio hermano Raúl. Así lo contó el oficial anónimo que protagoniza la serie “Las filtraciones del coronel”, en su capítulo 6, transmitido habitualmente en el canal de Youtube “El mundo de Darwin”.

Esta emisión estuvo dedicada a los secretos tras la amañada y escandalosa Causa Nro. 1 de 1989, que finalizó con el fusilamiento de Ochoa, del coronel Antonio “Tony” La Guardia, el capitán Jorge Martínez y el mayor Amado Padrón Trujillo el 13 de julio de 1989.

Según comentó a Darwin Santana el coronel de la Seguridad del Estado de la dictadura castrista, que le ha comunicado tantos secretos de la cúpula gobernante en la isla, el juicio y condena de Ochoa y su equipo ocurrieron “porque se filtró por la CIA que había movimientos de drogas en Cuba”, una información que “era muy secreta en aquel momento. Se manejaba en un círculo muy cerrado de la cúpula. Solo los principales generales lo sabían. Todos están implicados en esos hechos. Cuando aquello, Ulises Rosales del Toro era el sustituto único del Ministro de las FAR, Raúl Castro. Al filtrarse esa información, se busca desesperadamente una cabeza de turco para enjuiciarlo.”

Y Arnaldo Ochoa es la víctima ideal para cargar con las culpas de todos los líderes de la mal llamada Revolución. Él siempre supo que esto “fue ordenado por Fidel”, aclaró el oficial a Santana en su conversación, pues tuvo “la oportunidad de saber por las propias palabras de Fidel” que “estaba consciente de lo que estaba haciendo: echarse la culpa de lo que sucedió”, bajo la promesa de “cuidarle la vida [a Ochoa] y la de sus compañeros. Le prometió garantías de vida, incluso salir al exterior del país con documentos de identidad falsos, y buscarles un lugar secreto donde nadie los pudiera reconocer.”

Según el confidente, el propio Castro se entrevistó con Ochoa “en una casa de la Seguridad del Estado, colindante a su casa de Punto Cero, antes del juicio. Y le dijo, a modo de imploración, que en sus manos y en su palabra estaba el destino de la Revolución. Esas palabras nunca se me olvidan porque así textualmente me las dijo un coronel de la Seguridad del Estado que trabajó con ellos, conocido como El viejo”. Incluso le prometió una condena de “solo 9 años, aunque por ley te tocaban 17 años por el delito de narcotráfico.” Todo esto se lo confesó Ochoa al agente apodado El viejo, cuyo nombre el coronel no pudo facilitar a Darwin “por un problema de seguridad. Él está activo todavía, como yo ahora.”

El general Ochoa confió en su líder, que una y otra vez le prometió algo que no iba a cumplir al final, por eso “hay un momento en el juicio en que [Ochoa] se ríe, porque estaba cogido, estaba condenado. Lo que dijeron públicamente no fue lo convenido.” Pocas veces en la trasmisión pública por la televisión oficialista se aprecia esto, pues a la grabación “se le hicieron muchos cortes, como a una película”

El proceso se realiza en “un momento crítico, realmente crítico, porque el campo socialista se fue al carajo, hubo situaciones de hambruna, empezó todo lo del bloqueo. Entonces, Fidel lo encausa por este tipo de acciones que él mismo dirigió, pensó y organizó junto con Raúl y toda la camarilla de generales” y Ochoa “creyó en su palabra porque era muy apegado a Fidel y pensaba que bajo esa palabra de hombre, le iba a perdonar la vida.”

Cuando ya es claro que la promesa de Fidel Castro era puro humo para conseguir que Ochoa y sus hombres se culparan, y luego sellar sus silencios con las balas, se realiza un segundo juicio, en el que participaron solo generales del ejército del régimen. “Hubo una reunión de generales de todo el país, no solamente los de La Habana. Fue un juicio sumarísimo a puerta cerradas”, aclaró el coronel a Santana durante la entrevista.

Ante ese otro tribunal de sus compañeros de armas, el Héroe de Etiopía, como se le conocía, “se levantó y señaló con el dedo a todos los que estaban alrededor, y les dijo textualmente: ʽ¿Ustedes son los que me van a enjuiciar a mí?ʼ Pues todos son unos corruptos, millonarios. Son unos ladrones, unos delincuentes. A todos los generales, seguidores de la cúpula, [Ochoa] los enjuició con su dedo acusador”, refrendó. Y de esa reunión existe una grabación, pues “todos esos videos los conservan aún, pero obviamente, el pueblo no puede saber eso.”

El fusilamiento de Ochoa, La Guardia, Martínez y Padrón ha sido puesto en duda durante mucho tiempo, pues no existen pruebas de que haya sucedido, solo las afirmaciones oficiales del castrismo. Pero el coronel aseguró a Darwin Santana que sí ocurrió dicha ejecución, y los cuerpos de los condenados se encuentran sepultados “actualmente en el cementerio de Colón. Te puedo dar la ubicación exacta”, refirió y detalló que fueron enterrados en una especie de fosa común propiedad exclusiva de Fidel y su medio hermano.

“Es el único lugar donde no está edificado”, detalló. “Son 5 parcelas, 5 manzanas pequeñas que están por la parte de [la calle] Zapata, por la parte de atrás del cementerio. Ahí es donde se entierran a todos los casos que se consideran traidores a la Patria. Están toditos ahí”, afirmó.

Si bien el coronel no presenció el fusilamiento, sí ofreció amplios detalles de los ejecutores y de todos los movimientos que hicieron con los cadáveres una vez ultimados. El batallón de fusilamiento estuvo integrado por miembros del “Departamento 51 de la Seguridad del Estado, que siempre ha sido la sombra de todos los crímenes de lesa humanidad cometidos por la dictadura desde 1959 hasta la fecha. Es el grupo élite de Fidel Castro. Todos se reconocen, pero cuando van a fusilar a una persona, a algún peje gordo, se enmascaran. Siempre tienen la cara oculta y no saben quién es el que va a disparar.” A Ochoa y sus tres subordinados los fusiló un destacamento de 11 militares de este rango.

“Una vez ya fusilado Ochoa, lo envuelven en un nylon negro especial”, detalló la fuente de Darwin, aclarando que acto seguido les colocan “una chapilla de aluminio con un código”, y luego “los cuatro cuerpos fueron trasladados por Zapata en horas de la madrugada de ese mismo día en que los fusilan.”

Los trasladó un vehículo UAZ, más conocido como “wasabita”, de fabricación rusa. En la caravana iba una ambulancia de la Seguridad del Estado. Todo el personal, por supuesto, era de la Seguridad del Estado, y dentro de la ambulancia iban 4 oficiales de Fuerza Especiales.” El grupo era liderado por un auto marca Lada, y también tenía otro igual en la retaguardia.

Ya en el cementerio, el enterramiento se efectuó de una manera muy particular en la parcela indicada, para que al otro día no quedaran pruebas de que se trabajó en el lugar. Los militares levantaron la capa de césped y la acomodaron en un nylon “que tenían preparado en el terreno para no dejar huellas de tierra ni de nada.”

Los militares abrieron un “foso de más o menos 3 metros, casi 4, y metieron los 4 cuerpos en el mismo lugar” y “al final las Tropas Especiales sembraron otra vez el césped y le pusieron una clavija con una chapilla más grande con los 4 códigos. Porque ellos manejan todo a nivel de códigos”, detalló el coronel. “Ahí en ese sitio la chapilla deja de verse porque es una cosa muy pequeña y están enterrados los cuerpos de mucha gente que consideraban opositores. El día que Cuba realmente sea libre, se van a encontrar muchos cuerpos que hasta hoy están desaparecidos y las familias nunca supieron de ellos. Están enterrados en el mismo sitio.” El lugar, según el testimonio del oficial, es atendido solo por brigadas del Consejo de Estado.

“El entierro de Ochoa se filmó”, aseveró el coronel, despertando una lejana esperanza de que alguna vez se hagan públicas estas grabaciones. “Ellos filman todos estos momentos. Eso después se guarda en los archivos secretos del MINFAR, a los que solo tenían acceso Fidel y Raúl. Aparte de todos los secretos que tienen ellos, porque todos los Castro tienen secretos personales y los guardan en sus bibliotecas, en sus oficinas de estudio, dentro de sus propias casas. No pueden tener acceso ni sus mujeres.”

Todos estos muertos dejan familias detrás, a las que se les compra el silencio junto con amenazas de muerte. “Todas las familias de las víctimas tienen que firmar un contrato blindado, del cual no pueden ni hablar, ni pueden denunciarlo dentro o fuera el país”, aseguró el oficial a Darwin. “Luego que firman ese contrato reciben beneficios. Les dan todo el financiamiento necesario para irse a otros países, les dan todas las comodidades posibles para mantener el silencio. Pero este contrato convierte en traición cualquier divulgación de cualquier información, como la que te estoy dando ahora. Eso le cuesta la vida hasta al niño de la familia, a todos. Ellos se llevan a todo el mundo. Los salen a buscar donde quiera que se metan, y ahí hacen toda las atrocidades.”

En el caso muy específico de la familia de Arnaldo Ochoa, le comunicaron el lugar de su sepultura, pero un año después, en 1990 pero nunca les permitieron ir a ponerle “flores, ni hacer ningún tipo de estancia en el lugar.”


https://www.facebook.com/share/v/faQgznCxWwGkQbYS/?mibextid=oFDknk

“LAS FILTRACIONES DEL CORONEL” PARTE 3: MARIELA CASTRO “DEBERÍA ESTRANGULARSE ELLA MISMA POR MENTIROSA Y SINVERGÜENZA”

Sobre el Autor

Editorial

Editorial

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *