POLICÍA HABANERA DEJA DESAMPARADA A JOVEN MADRE Y SU HIJO AMENAZADOS DE MUERTE POR AGRESOR SEXUAL
Policía habanera deja desamparada a joven madre y su hijo amenazados de muerte por agresor sexual. Dos oficiales de la 6ta. Estación de la Policía del municipio habanero de Marianao desestimaron que existiera peligro para la joven cubana Gisselle Ordoñez Milián y su hijo de 7 años que fueron amenazados de muerte el pasado miércoles 4 de octubre por su ex pareja Roberto Valdés Mesa, quien tras intentar violar a Ordoñez le destruyó varios equipos eléctricos de su casa y la golpeó, obligándola a buscar refugio fuera de su hogar para protegerse.
Según publicó el usuario Marcos Paz Sablón en su perfil de Facebook por petición de la víctima, “Roberto Valdés Mesa, un ex suyo de hace más de un año, la esperó en el Centro Fray Bartolomé (de las Casas) —donde Gisselle cursa Diseño y Maquetación Web—, la siguió a su casa, intentó violarla, la agredió físicamente, le destrozó la casa- —rompió el televisor, el refrigerador, la balita de gas, la puerta de la cocina, objetos varios— y amenazó de muerte a Gisselle y a su hijo”.
Cuando Gisselle fue a denunciar a su agresor poco después en la 6ta. Estación, no le fue tomada una declaración por parte del instructor del caso, oficial Yander” y en la denuncia no consta “ni el intento de violación ni la agresión física hacia su persona”.
Luego de esperar infructuosamente 5 días porque la policía arrestara a Valdés Mesa, sin resultado alguno la joven acudió el lunes 9, en compañía de Paz Sablón, “a la Fiscalía Municipal de Marianao, donde luego de explicar el caso, fue referida al Fiscal de Menores, que activó a la parte de Menores de la 6ta. Estación”. De nuevo en el lugar, “se entrevistó con una oficial de Menores, con el jefe de la Zona de Menores, con el instructor a cargo del caso —oficial Yander— y con el Jefe de Instrucción de la 6ta Estación”.
Los resultados de estos trámites fueron completamente adversos para la joven, pues las autoridades de Instrucción Penal desestimaron “que existiera un peligro real hacia Giselle y su hijo”, según relata Paz Sablón, y luego informaron que “el agresor, Roberto, no había sido detenido aún, a pesar de estar circulado desde el jueves por el Dpto. Búsqueda y Captura”. Gisselle y su acompañante se retiraron con la “promesa de procesar el caso por abuso de género con una fiscal de la Fiscalía Municipal”, algo que tampoco ha sucedido.
La acción más efectiva que emprendieron los policías fue intentar forzar a Gisselle a tener un careo con Manuel, a quien se le citó verbalmente a la 6ta. Estación, sin acompañamiento policial. Algo que tampoco sucedió. Durante este proceso, el victimario le escribió a Gisselle vía WhatsApp con preguntas triviales como si no hubiera sucedido nada.
El 12 de octubre se le informó a la víctima que su agresor “sigue en la calle, una semana, un día y once horas luego de haber cometido su crimen”, con la consecuente violación del protocolo policial que impone detener a los sospechosos en un plazo de 72 horas.
Paz Sablón denunció en su post que “el Instructor del caso, oficial Yander, ha bloqueado a Giselle de su teléfono, a pesar de los intentos de esta de mantener una comunicación con este y mantenerlo informado de los pormenores del caso y de los intentos de comunicación del agresor, en concordancia con lo que le pidiera a Giselle el Jefe de Instrucción de la 6ta Estación”.
POLICÍA DEMORA EN APRESAR AL AGRESOR DE la JOVEN CUBANA GISELLE ORDOÑEZ
