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OFICIALES ROBAN PROVISIONES DESTINADAS A LA ALIMENTACIÓN DE LOS RECLUSOS DE LA PRISIÓN DE PINAR DEL RÍO

OFICIALES ROBAN PROVISIONES DESTINADAS A LA ALIMENTACIÓN DE LOS RECLUSOS DE LA PRISIÓN DE PINAR DEL RÍO
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Oficiales roban provisiones destinadas a la alimentación de los reclusos de la prisión de Pinar del Río. Los oficiales y cocineros de la Prisión Provincial de Pinar del Río, más conocida como Kilo 5½, roban parte de las provisiones destinadas a la alimentación de unos 600 reclusos, y confiscan la comida que los familiares de estos les llevan los días de visita, según denunció el preso político Jorge Luis Rodríguez Valdés, de 45 años de edad, miembro de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) y la Alianza Democrática Pinareña.

Vía telefónica, el opositor declaró al medio independiente CubaNet que la población penal de Kilo 5½ solo recibe la mitad de los alimentos destinados a ellos, y acusó como máximos responsables al jefe de la prisión, mayor Eliecer Díaz Rodríguez y al capitán Norge, jefe del área 2 de Prisión Preventiva, en la que Rodríguez Valdés cumple 4 años de privación de libertad por el presunto delito de “desacato”.

El preso político detalló que los bienes robados por los militares y el personal de la cocina son empleados para cebar cerdos que crían varios de ellos, o para consumir en sus hogares, mientras que la ración de arroz servida en cada comida no excede los 50 gramos, y muchas veces ni siquiera los 45. Es acompañado solamente por una sopa también de arroz, una pasta de composición desconocida tanto por los oficiales como por los presos, y si acaso un trozo de yuca de apenas 10 gramos de peso.

Enfatizó en la prohibición que pesa sobre la población penal de entrar a las galeras los alimentos que les proveen sus familiares, los que son requisados con la anuencia del capitán Norge, y terminan igualmente alimentando a los cerdos y a las familias de los oficiales y el personal de la cocina.

El opositor aclaró que esta denuncia puede costarle perder el privilegio de usar el teléfono, como ya le sucedió en el pasado mes de agosto, por denunciar otras irregularidades y abusos cometidos por los guardias de Kilo 5½.

Jorge Luis Rodríguez Valdés fue condenado por pintar carteles contra el régimen en la pared de una oficina del Comité Militar de Pinar del Río, y en la terminal de trenes del municipio de San Juan y Martínez, donde reside.

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