RUSIA Y COREA DEL NORTE BATEN CON MÁS FUERZAS LOS TAMBORES DE GUERRA
Rusia y Corea del Norte baten con más fuerzas los tambores de guerra. Las naciones totalitarias como Rusia y Corea del Norte baten los tambores de la guerra en este fin de año para que el venidero 2024, bisiesto por demás, no comience entre leves aires de paz, sino entre las humaredas y la peste a quemado de las guerras.
Mientras la empresa Rostec anunció que multiplicó por 50 la producción de misiles para lanzaderas múltiples y de municiones para armas ligeras y medio millón de ciudadanos rusos firmaron contrato con el ejército invasor de Putin que busca colonizar Ucrania, el “rey” comunista de Corea del Norte, Kim Jong-un, llamó fortalecer aun más la capacidad nuclear del país y a intensificar los preparativos bélicos ante la que calificó como tensión “sin precedentes” en la península de Corea.
“Incrementamos en 50 veces la producción de municiones para armas ligeras y para sistemas de lanzaderas múltiples”, anunció Serguéi Chémezov, director general de Rostec durante una reunión televisada con Vladimir Putin y alardeó de también que se incrementó 7 veces la producción de tanques de guerra, y en 5,5 la de transportes blindados. “Se trata de un incremento global”, sentenció el aliado de Putin, al frente de uno de los mayores productores mundiales de armas, aviones y helicópteros.
Ante la heroica resistencia ucraniana a las oleadas de cuerpos y metal que Putin lanza sin parar a esta nación soberana, el gobierno ruso busca ganar por pura superioridad cuantitativa que minimice las masivas pérdidas que ha sufrido en casi 2 años de invasión. El vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia, Dmitri Medvédev, informó recientemente que “desde el 1 de enero de 2023 se han alistado en el Ejército como militares profesionales medio millón de personas” y el propio Putin afirmó el 14 de diciembre que unas 1500 personas diarias firmaban contratos con su ejército.
Entre tanto, durante la segunda jornada del destacado plenario celebrado por el hegemónico Partido de los Trabajadores sobre el que reina el tercero de la dinastía Kim, el líder absoluto solicitó “acelerar aún más los preparativos de guerra”, según reportó la agencia estatal KCNA, presuntamente sostenido en “análisis en profundidad de la grave situación política y militar en la península coreana, que ha llegado a un punto extremo sin precedentes en la historia debido a los movimientos de confrontación de Estados Unidos y sus fuerzas vasallas”.
Asimismo, Kim Jong-un defendió el “derecho” de su país a ampliar la cooperación estratégica “con países antiimperialistas”, sin especificar con cuáles, y a participar activamente en la “lucha antiimperialista” a escala internacional. Tras sus palabras se adivina una sed de sangre y deseo desesperado por colaborar con las potencias Rusia y China, que potencialmente derrotarían a EE.UU y a las democracias europeas en un posible conflicto global.
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