UNIÓN ELÉCTRICA DE CUBA LLEVA A CABO FIRMA DE “CÓDIGO DE ÉTICA” EN MEDIO DE LOS APAGONES
Unión Eléctrica de Cuba lleva a cabo firma de “código de ética” en medio de los apagones. En medio de una situación de apagones recurrentes que afectaron aproximadamente al 34% del territorio nacional, los cubanos expresaron su indignación ante la falta de soluciones por parte de la Unión Eléctrica (UNE) y el enfoque publicitario dado a la firma del Código de Ética por parte del monopolio estatal.
La UNE informó sobre un déficit significativo en la capacidad de generación eléctrica, atribuido en parte a la falta de combustible en varias centrales de energía.
La situación, que se ha agravado desde finales de enero de 2024, ha llevado a la frustración generalizada entre la población.
Los comentarios de los usuarios en los partes diarios de la UNE reflejan la impotencia y el malestar de la población ante la situación, con críticas directas hacia la falta de mejoras y la aparente desconexión entre los problemas reales y las acciones del gobierno.
Se menciona la ironía de eventos como el Festival del Habano contrastando con la realidad de los apagones en provincias.
La firma del Código de Ética por parte de los dirigentes de la UNE generó más críticas y se percibió como una burla hacia la situación real que enfrentan los ciudadanos.
Los comentarios en redes sociales reflejan un sentimiento de descontento y escepticismo hacia las intenciones y acciones de las autoridades.
Las autoridades atribuyen la crisis energética a la falta de combustible y a las averías en las centrales termoeléctricas, así como a la limitación en la importación de combustibles debido a la falta de divisas.
Sin embargo, informes de Reuters sugieren que la falta de suministros puede no ser el problema principal, sino más bien dificultades internas en la infraestructura y la logística.
A pesar de las cifras de importación de combustible, que indican un suministro teóricamente suficiente, la realidad en el terreno sigue siendo la falta de energía eléctrica y la constante interrupción del servicio, lo que genera escepticismo sobre las explicaciones ofrecidas por las autoridades.
